Llegó
octubre. 2015 agota sus horas, pero no la esperanza. A los días grises, de
luto, le han aparecido lunares, lunares de colores. Se han terminado tareas,
aunque surjan nuevas. Se han transformado personas y climas. Se han caído
ilusiones, proyectos, pero pueden tejerse otros. Entre adioses y bienvenidas se
instala un nuevo tiempo, un otro devenir. Espero lo que vendrá. Dejaré fluir.
Desde la Argentina, un refugio para quienes deseen indagar en el imaginario de un amante de la palabra... Literatura, periodismo; fusiones e invenciones en un océano virtual que jamás pensé integrar.
P O E S í A /// P O E S í A
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//L I T E R A T U R A//
He naufragado en un mar de recuerdos.
Ante el futuro incierto, busco en el presente
al que soy. Hoy ya no es ayer.
G.D.
Estar ROTO DE AMOR, duele.
G.D.
1 comentario:
Bien, amigo. Entre balances y esperanzas transcurre la vida. Y qué bueno que los amigos estén siempre ahí, para contener, apoyar, avanzar, acariciarnos el alma.
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