S I M P L E
Yo.
El otro.
El mismo,
aunque a veces
pese más aquél.
Uno.
El doble.
El opuesto.
Un negativo del otro;
de quien uno es.
Yo,
simplemente.
Siempre,
yo.
Triste y asustado,
valiente y feliz.
Ese otro. Siempre yo.
El mismo.
El único.
Gustavo D´Orazio/2011
2 comentarios:
Hola Gustavo. Interesante poema. La individualidad, la diferencia la coordinas necesariamente con la solidaridad hacia el otro. Magnífica fusión.
Saludos
Simple y hermoso.
Simplemente hermoso.
Una sonrisa.
Publicar un comentario